El pasado domingo, durante el juego entre los Padres de San Diego y los Mets de Nueva York, Manny Machado y su mánager Mike Shildt fueron expulsados tras un desacuerdo con el conteo de strikes del umpire Adam Beck. Este incidente ocurrió en la parte alta del sexto inning cuando Machado recibió el tercer strike de su turno al bate y, evidentemente frustrado, golpeó su bate contra el suelo.
Machado, insatisfecho con la decisión del umpire, volvió a la caja de bateo para confrontar a Beck. Aunque la discusión fue intensa, no hubo contacto físico, lo cual sugiere que no debería haber sanciones adicionales por parte de la MLB. La reacción de Machado reflejaba su descontento con el conteo, que consideraba incorrecto.
El mánager de los Padres, Mike Shildt, salió rápidamente de la caseta para defender a su jugador, pero fue incapaz de calmar la situación. Shildt también fue expulsado tras una acalorada discusión con el umpire. Este incidente destaca la determinación del mánager de apoyar a sus jugadores, aunque en esta ocasión resultó en su propia expulsión.
Este incidente marca la onceava vez que Machado es expulsado de un juego y la decimotercera para Shildt, siendo la tercera expulsión del mánager en lo que va de la temporada. La doble expulsión se produjo en un contexto de alta tensión, con los Padres luchando por mantenerse competitivos en una temporada llena de altibajos.
