La estadounidense ha decidido pasar tiempo sin sus hijos, en un fin de semana solo para ella
Una playa en las Islas Turcas y Caicos ha sido el escenario perfecto para que este fin de semana Kim Kardashian presumiera el tremendo cuerpo que se gasta a sus 43 años en un diminuto traje de baño, que se ha hecho a más de uno botar la baba.
Con el sol y el gua cubriendo su físico fue como la socialité, modelo y creadora de la marca Skims, gritó al mundo como es una gran experta en marcar tendencias en las redes sociales, por su sensualidad y físico.
Los paparazzi presentes en el lugar se deleitaron a ver a la expareja del rapero Kanye West entrar y salir del agua, disfrutar de la arena blanca y hasta utilizar un sombrero tipo vaquera en color negro. Sin embargo, la imagen que ha llamado la atención es la cual aparece de espalda con su retaguardia llena de arena.
Sin una sola gota de maquillaje y su abundante melena negra mojada, la madre de cuatro hijos demuestra que en su vida no todo es producción, maquillaje, pasarelas, revistas y eventos, también existe tiempo para estar en familia, ya que su hermana Klhoé también estaba con ella, optando por un traje de baño completo con lentes y bandana.
