En un reciente juego de los Yankees, el jugador Juan Soto se encontró en una situación polémica cuando intentó pedir un tiempo fuera durante su turno al bate.
En un momento crucial del partido, Soto levantó la mano en señal de solicitar el tiempo.
Una práctica comúnmente aceptada en el béisbol para permitir que el bateador se reacomode antes del lanzamiento.
Sin embargo, en esta ocasión, el árbitro principal no concedió el tiempo solicitado, lo que dejó a Soto visiblemente molesto y desconcertado.
La negativa del árbitro generó una inmediata reacción tanto de Soto como de sus compañeros y el cuerpo técnico de los Yankees.
Soto, conocido por su concentración y disciplina en el plato, se vio obligado a continuar su turno sin la oportunidad de reajustarse, lo que potencialmente afectó su desempeño en ese momento específico del juego.
La decisión del árbitro fue cuestionada no solo por los Yankees.
Sino también por los comentaristas y fanáticos que observaron el incidente, ya que el otorgamiento del tiempo fuera suele ser una rutina casi automática.