Jurickson Profar se ha convertido en la sorpresa más destacada de la temporada 2024 de MLB y en la nueva cara de los Padres de San Diego. Su impacto ha eclipsado incluso a jugadores con contratos más llamativos. Después del traspaso que envió a Juan Soto a los Yankees de Nueva York, los Padres firmaron a Profar por un contrato de un año y un millón de dólares.
Este movimiento trajo de vuelta a Profar a San Diego, donde ya había jugado del 2020 al 2022, además de haber sido parte de la postemporada en 2023. Después de un año de reflexión, el jugador de 31 años reevaluó su carrera, centrando su enfoque en la inteligencia sobre la fuerza y la velocidad. “Porque todos los demás años no cumplí las metas que me propuse”, afirmó. “Este año, solo jugaré”.
Profar ha mostrado un desempeño excepcional en el campo, destacando en varias estadísticas clave de las Ligas Mayores. Es el único jugador de los Padres entre los 10 mejores en promedio de bateo y porcentaje de embasamiento, y entre los 20 mejores en porcentaje de slugging. Además, es el único que se ubica entre los 40 mejores en cualquiera de esas categorías.
Su contribución va más allá de las estadísticas. Profar ha demostrado ser un jugador clave en momentos críticos del juego, con un promedio de .455 en situaciones cerradas y tardías, y .360 con corredores en posición de anotar. Además, lidera al equipo en carreras impulsadas que dan la ventaja y carreras impulsadas ganadoras.
El reconocimiento de sus compañeros es evidente, con Fernando Tatis Jr. y Manny Machado elogiando su desempeño. Jake Cronenworth lo describe como el “pegamento” del equipo, capaz de ayudar a cada jugador de la manera precisa. Con su impacto en el terreno de juego y en el ánimo del equipo, Jurickson Profar se ha ganado un lugar destacado en la historia reciente de los Padres de San Diego.
