Una noche cargada de controversia se vivió en el hogar de los Mets de Nueva York, cuando una jugada se tornó demasiado complicada y una decisión de la MLB la hizo aún más polémica.
Durante el juego de la serie entre los Cubs y los Mets, la última entrada estuvo llena de tensión. Los Cachorros de Chicago mantenían una estrecha ventaja de una carrera hasta el final del encuentro, pero los Mets estaban al borde de igualar el marcador y forzar entradas adicionales.
Sin embargo, una posible interferencia del receptor de los Cubs impidió que los Mets tuvieran siquiera esa oportunidad. Con corredores en segunda y tercera, un out y el último turno al bate de Nueva York, Jeff McNeil conectó un elevado al jardín derecho que Pete Alonso consideró lo suficientemente profundo como para intentar anotar.
Pero lo que Alonso no esperaba era encontrarse con el receptor Miguel Amaya, posicionado en la parte superior del plato mientras esperaba el lanzamiento desde los jardines. Mientras Alonso se aproximaba al plato, intentó deslizarse debajo de Amaya sin éxito.
Tras una larga revisión por parte de la oficina principal de la MLB, se determinó que Amaya no obstruyó el plato y Alonso fue declarado out, asegurando la victoria de Chicago por 1-0. Esta decisión molestó al manager de los Mets, Carlos Mendoza, quien reveló que él y otros managers habían recibido un memorando de la liga que especificaba las acciones legales e ilegales por parte del receptor antes y durante una jugada en el plato.
“Muy claramente, en ese correo electrónico que recibimos, se indicaba que a los receptores no se les permitía colocar el pie delante del plato, sobre el plato, ni sentarse a horcajadas sin posesión de la pelota. Estaba muy claro que el jugador tenía su pie izquierdo sobre el plato sin tener la pelota. Creo que tomaron la decisión equivocada… Claramente, en la repetición, estaba bloqueando el plato sin tener la pelota”, expresó Mendoza.